¿Cómo pueden distinguirse las partículas por su tamaño?

Una definición más precisa, basada en la distinción de las partículas según su tamaño, es la siguiente.

El primer grupo contiene partículas cuyos tamaños son inferiores a 1 nm, y un ejemplo de esa categoría son las moléculas de agua cuyo tamaño oscila entre 0,3 nm y 3Å.

El siguiente grupo es el de las nanopartículas, que suelen tener un tamaño comprendido entre 1 y 100 nm y pueden ser, por ejemplo, óxido de hierro natural, sulfuro de hierro, plata y oro. También están las nanopartículas creadas y utilizadas en la fabricación de gafas a prueba de arañazos, pigmentos concentrados, pinturas resistentes al agrietamiento, inyecciones de dextrano de hierro, ventanas autolimpiables, polímeros termosensibles, revestimientos cerámicos para células solares y nanopartículas recubiertas de anticuerpos monoclonales.

El rango de tamaño de las partículas submicrónicas se sitúa entre 0,1 y 1μm. Este grupo incluye varios tipos de partículas en el agua de mar, arcillas ultrafinas, pigmentos y carbonatos cálcicos finos.

El grupo más grande incluye micropartículas cuyos tamaños oscilan entre 1 y 100μm, como minerales, cemento, productos farmacéuticos, pinturas, tóneres, productos de baterías y materiales de impresión 3D.

Las partículas gruesas incluyen yesos, rellenos, azúcar, café y celulosa microcristalina. Sus tamaños oscilan entre 100 y 1000μm.

Por último, hay gránulos que pueden considerarse aglomeración de partículas finas, entre los que se incluyen gránulos farmacéuticos, plásticos extruidos, arroz y fertilizantes.

Comúnmente, los tamaños de los gránulos son superiores a 1000μm.

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